Los búlgaros de leche tienen muchísimos beneficios tanto para la salud como para nuestro cabello y piel, por algo son el remedio por excelencia de muchas personas. Consumirlos regularmente puede ayudar, incluso, a prevenir algunas enfermedades.
Existen dos versiones: la de los búlgaros de leche y los búlgaros de agua, que tendrán diferentes aportaciones al cuerpo según la base con la que sean preparados, pues los de agua son más recomendables para las personas que son intolerantes a la lactosa, lo que hará que se produzcan menos lactobacilos, aunque es igual de buena.

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Enfermedades que combaten los búlgaros de leche
Los búlgaros de leche son ideales para fortalecer nuestro sistema inmunológico, gracias a que contiene grandes cantidades de probióticos, vitaminas y más, lo cual nos puede ayudar a evitar enfermedades como:
- Colitis
- Estreñimiento
- Diarrea
- Infecciones
- Intestino irritable
- Colesterol alto
Su consumo no es recomendado para personas que sufran intolerancia a la lactosa, pero, como mencionamos, puedes recurrir a los que están hechos con agua.
¿Cómo tomar búlgaros de leche?
Esta bebida hecha a base de granos de kéfir puede consumirse a cualquier hora del día, pero lo ideal es hacerlo en ayunas para que sea lo primero que entre a tu organismo y te ayude con la digestión.
También puedes hacerlo entre comidas, solo recuerda no excederte, pues el consumir de más podría provocarte efectos secundarios, como inflamación o diarrea, ya que es un producto sumamente digestivo.
Además, toma en cuenta que el sabor de los búlgaros de leche es similar al del yogur, lo cual es un poco ácido, cremoso y, en algunos casos, llega a ser amargo, para que no te desconciertes si encuentras alguno de estos sabores en tu paladar.